Como con todo, hay libros que llegan a mí rebuscando entre
estanterías, otros bicheando por la web y otros, por recomendaciones o
comentarios de amigos y conocidos.
El que traemos
hoy llegó justo así, por una buena recomendación y menos mal porque, torpe como
soy en la materia que lo llena, es probable que, yo solita, nunca me hubiera
animado a leerlo.
Creo que ya os
he contado que, objetivamente hablando, soy una negada para las matemáticas. A
otras ciencias les puedo coger más o menos el aire pero las matemáticas… en
fin, me cuesta un mundo entenderlas y admiro y envidio a quien es capaz de
hacerlo con facilidad.
Por eso los
libros de este tipo me causan bastante respeto y por eso también, me parece
importante que existan. Pero ojo, no estoy hablando de que existan libros sobre
matemáticas, ni siquiera libros sobre matemáticas para niños, no señor, yo
hablo de que existan libros sobre matemáticas COMO ESTE.
¿Por qué así? Me
preguntaréis y si os digo la verdad, me resulta complicado contaros todas las
razones.
Para empezar porque
con una temática tan árida para algunos y tan seria para otros, este libro
destila alegría y buen rollo desde la primera hasta la última página. Para continuar
porque sus protagonistas, don niños curiosos, Sal y Ventura, un perrito
simpático (y muy listo), Gauss y Mati, una marisabidilla pelirroja y con mucha
paciencia, no nos dejan aburrirnos ni dejar de sonreír ni un minuto.
Este no es un
libro de matemáticas al uso sino un montón de pequeñas historias llenas de
humor en las que se nos explica no solo que las matemáticas están en todas
partes sino que son mucho más agradables de lo que pensábamos.
Convivo con una
familia llena de científicos, en casa con Jaime y fuera con mis padres, tíos,
primos… por eso nunca se me escapó que las matemáticas eran necesarias y que,
por mucho que yo las odiara, estas servían para hacernos la vida más fácil.
Mati, Sal, Ventura y Gauss vienen a explicarnos esto de manera muy claro y
desde luego, mucho más entretenida que la tradicional.
¿Sabíais que los
grandes magos usan las matemáticas en sus trucos? ¿Conocéis la historia de los
números? ¿Sabéis pasar de grados Celsius a Fahrenheit? ¿No os gustaría descifrar y escribir mensajes
en una clave secreta? (Creo que este es mi capítulo preferido). Pues todo eso y
mucho, muchísimo más es lo que se esconde en las páginas de Hasta el infinito y más allá. No son
explicaciones de escuela, son datos reales que nos dan otra visión del mundo y
que vienen siempre explicados de manera amena y con mucho humor.
No voy a
mentiros diciendo que gracias a este libro las matemáticas han dejado de ser un
misterio para mí, seguramente se me resistirán siempre y además, me gusta que
en mi vida haya misterios, pero sí es cierto que Mati y sus mateaventuras me
han hecho verlas con otros ojos, me han resuelto algunas dudas, me han creado
otras y me han hecho pensar que, si un día tengo niños, quiero que las vean
desde esta perspectiva, se les den bien o mal, le gusten más o menos, que sepan
que van más allá de las clases y las sumas.
Con un lenguaje bastante accesible,
teniendo en cuenta su contenido y complementado con unas ilustraciones muy
alegres y cercanas me parece que tanto su autora, Clara Grima, como su
ilustradora, Raquel García Ulldemolins, han sabido crear un conjunto acogedor y
original para un tema que muchas veces resulta frío y antipático.
Honestamente creo
que este es un libro diferente y lo recomiendo para grandes y chicos, me parece
que todos pueden pasarlo bien leyéndolo, incluso los que ya saben mucho del
tema y que es una lectura conjunta estupenda.