Esta es la noche del miedo, la de los
fantasmas, las brujas y los vampiros. La noche en que se abre la
puerta del mundo entre vivos y muertos y algunos de los habitantes de
aquel lado vienen a visitarnos.
Ya sabéis que yo soy miedosa y que,
aunque me gustan estas cosas, no se me ocurrirá ver una película de
terror cuando todo esté oscuro ni leer ninguna historia de fantasmas
excesivamente seria, tal vez vea una peli de monstruos simpáticos,
eso sí, con palomitas, mantita y mis lanas. En fin, por no
olvidarnos de las visitas que ya se están preparando para cruzar la
puerta.
Como yo soy así siempre me sorprende
y me hace gracia cuando algún niño me comenta que los libros de
miedo para ellos no son de miedo de verdad y que no asustan nada.
Seguramente tengan razón, por eso yo este año he buscado un libro
que dé miedo de verdad y que sea bastante terrorífico. No sé si lo
he conseguido pero la verdad es que me ha parecido que Esqueleto
ladrón reunía bastantes cualidades para serlo.
Por un lado, un niño que no puede
dormir porque escucha ruidos extraños en su casa, por el otro, un
esqueleto que tiene frío y que necesita cubrirse con la carne de
otra persona... No os quiero contar más para no estropearlo pero
dejadme que os diga que el final es absolutamente inquietante.
Me ha gustado este libro porque mezcla
el humor y el terror, tanto por su contenido como por su formato e
ilustraciones, en tonos oscuros, con un toque de verde y con
ilustraciones entre simpáticas y aterradoras, la historia que nos
narra es de esas que podrían ponernos los pelos de punta pero que,
por cómo está tratada, quita algo de hierro al asunto. Nos asusta,
sí, pero con calma. Supongo que eso se debe a que no encontramos un
esqueleto malo malísimo y a que, en cierta forma, entendemos su
comportamiento.
En cualquier caso, es un libro para
niños valientes, que hoy tengan ganas de pasar aunque sea, un
poquito de miedo.
Y como todos andaréis muy liados,
entre disfraces, calabazas, huesitos de santo y castañas, a nosotros
no nos queda más que desearos un feliz puente y una noche todo lo
terrorífica que cada uno quiera.
Feliz noche terrorífica también para ti, jeje.
ResponderEliminarBesines, Matilda!
Uys, pues no sé, que mi niña es un poco miedica, como su madre... Que yo leo los libros de terror y veo las pelis de miedo como tú, a plena luz del día, jajajaj. Bueno, si estoy acompañadita, me animo alguna que otra noche, pero acompañadita... Que de valiente tengo poco, jajajaj
ResponderEliminarFeliz Halloween guapa!!!
Besotes!!!
Qué libro más salao!!! =)
ResponderEliminarBesotes
Estupensa elección, me parece de lo más original, anotado queda!! Un besazo!!!
ResponderEliminarYo no leo libros de miedo ni en compañía. Es una pena, porque así me pierdo una parte importante de la literatura. Este libro parece muy gracioso. Veré si lo compro para mis nietos.
ResponderEliminarMuchos besos.
¡Gracias, Carmen! Espero que la disfrutaras ;)
ResponderEliminarBesazos.
Jajaja, Margari, aquí estamos las chicas del club de las valientes, ¿eh? La verdad es que este libro es bastante impresionante para según que edades. Tu princesa ya es un poco más mayor pero vamos, que si no os gustan... ¡tampoco hay necesidad de irse a la cama con el corazoncito encogido! ;)
ResponderEliminarUn abrazo guapa.
Lo es, Shorby, muy conseguido, la verdad. Las ilustraciones no tienen desperdicio.
ResponderEliminarUn besazo.
Original sí que es, Meg, hay que reconocerlo. Es una historia diferente, teniendo en cuenta cómo son los libros de "terror" para niños.
ResponderEliminarUn beso, guapa.
Jajaja, Conchita, como le digo a Margari, el club de las valientes.
ResponderEliminarYa me dirás, si te animas, qué opinan tus nietos, seguro que no se asustan ni la mitad que nosotras ;)
Un besazo.